Mis queridos hombres

Que tenemos que hablar de muchas cosas,

compañero del alma,

compañero…

 

Mis queridos hombres, varones de bien que en estos tiempos de ruido andáis, como canta el tango, solos, fané y descangallados; señalados, juzgados, cuestionados, vulnerables, desnortados, sin saber muy bien dónde pisar sin oír un ay; mis queridos hombres, herederos de aquellos que no cambiaron un pañal en su vida y que hoy tenéis un máster en marcas, precios y texturas; que no solo no aguardáis fumando en la sala de espera sino que pedís hacer el piel con piel mientras ella se recupera de la cesárea; que gastáis amor del mayúsculo tratando de comprender y que pasáis con humildad al segundo o tercer plano sin despeinaros más que por dentro.

Mis queridos hombres, herederos del cazador de mamuts que volvía a casa solo para entregar la presa y que hoy sois tan parte del hogar como vuestra santa, que ponéis lavadoras con la misma naturalidad que redactáis un informe, que bañáis a la prole casi con el mismo mimo que laváis el coche, que lo mismo plancháis un huevo que freís una camisa, que entendéis y respetáis que hoy no nos apetezca y aceptáis un cariñoso bufido por respuesta.

Mis queridos hombres que nos enseñáis que no hay un único modo innegociable de hacer las cosas, que no todo ha de estar siempre perfecto, que tenéis la valentía de hacernos ver que nuestra brutal autoexigencia muchas veces termina convertida en una soberbia incapacidad de delegar. Hombres queridos que tomáis la iniciativa y conocéis tan bien como nosotras el trabajo invisible que sustenta un hogar: las citas del médico, los cumpleaños, las facturas del banco, las actividades extraescolares, las terapias, los partidos de fútbol, la cartilla de vacunas o la lista de la compra. Hombres que, por las circunstancias que sean, lleváis solos el peso del hogar o la crianza de los hijos; que sabéis que se acabó la leche, que hay que comprar jabón del lavaplatos, que no abriga tanto el denim como la pana y que miráis atentamente el menú del colegio para programar las cenas.

Mis queridos hombres, empresarios de pro, que reconocéis a vuestras empleadas por su valía y recibís con agrado la noticia de un embarazo porque sabéis que la maternidad es, entre otras cosas, el mayor bien con el que puede contar la economía de un país (por no hablar de la garantía de las pensiones de vuestros hijos); estimados médicos que todavía conocéis la palabra delicadeza y no construís frases tipo «Hágase la amnio que aún estamos a tiempo» o «Me imagino que querrá usted aprovechar la cesárea para ligarse las trompas»…

Mis queridos hombres, apreciados maestros que educáis en el respeto a nuestros hijos y queridos hombres jóvenes y adolescentes que quizá no habéis oído decir que el amor consiste en buscar el bien del otro antes que el vuestro pero lo intuís y lo ponéis en práctica; queridos abuelos, viudos y jubilados que pasasteis haciendo el bien y seguís haciéndolo a diario; maravillosos educadores de nietos, abuelos nodriza, cuidadores veinticuatro horas de abuelas con alzheimer, demencia o enfermedades degenerativas,  que os alimentáis de frases como «ella no sabe quién soy yo, pero yo sí sé quién es ella».

Mis queridos hombres, inmensa mayoría silenciosa, padres, esposos, novios, compañeros, amigos, hermanos, que en un par de tardes habéis visto cambiar el cuento más que en varios siglos de literatura y que en un par de generaciones os habéis tenido que reeducar a base de esfuerzo, que habéis logrado lo impensable y que contempláis con serena y consciente responsabilidad el camino que queda por andar: qué orgullosas estamos de vosotros.

 

 

También te puede gustar...

32 comments

  1. Me ha chiflado. Muchas gracias. Se lo voy a mandar a mi marido para darle las gracias HOY. Si, HOY que parece que solo contamos nosotras y que, al menos yo, sin él no sería yo ni nuestros seis serian ellos.

  2. Ole! Me parece maravillosa tu agradecimiento a ese «trabajo en la sombra» que hacen los hombres de nuestra vida, que parece en estos tiempos que son los malos de la película, cuando son, como lo somos nosotras para ellos, uno de los pilares de nuestras vidas. Gracias por acordarte de ellos en un dia como el de hoy, porque no somos enemigos, somos parte del mismo equipo remando en el mismo barco con un mismo objetivo.

  3. Muchas gracias por el artículo, Mar. Me he sentido muy identificado. No es nada frecuente leer a una mujer hablando bien de los hombres (salvo en este blog,.. je, je je), así que se agradece mucho este «reconocimiento». Muchas gracias y mucho ánimo, me encanta vuestro blog.

  4. Gracias infinitas. Por escribir tan bien, por reconocer nuestros esfuerzos y por animarnos a seguir intentando ser más justos, más humanos y mejores compañeros. Yo sé que seguiré metiendo la pata incontables veces, y me cuesta mucho evitar algunos dejes porque no me educaron bien y he tenido que aprender (y desaprender) demasiadas cosas, pero nunca voy a dejar de intentar mejorar cada día. Esto también es igualdad. Felicidades, porque seguro que tienes a un hombre maravilloso a tu lado (o a varios).

  5. Muchísimas gracias por este enfoque tan necesario en estos días.Yo no estoy en guerra con ningún hombre;sin mi marido yo sería peor persona.¡Gracias!

  6. Muchas gracias por estas palabras, especialmente en un día como el de hoy. Me han emocionado todas y cada una de ellas. Me alegra saber que existen mujeres que conocen y valoran a los hombres que realizan, ya sea de forma exclusiva o compartida, todas o algunas de esas tareas «supuestamente asignadas» a ellas, de igual forma que también existimos hombres que valoramos a las mujeres en los mismos términos. Creo que a todas y todos mis iría mucho mejor si nos olvidáramos de hablar de mujeres por aquí y hombres por allá, y nos centráramosen las personas, en las buenas personas, las de buena voluntad, las de buenos sentimientos, las respetuosas y generosas con el otro, las que como muestra de ese amor, se preocupan más del bienestar del otro que del suyo mismo, recibiendo a su vez como contrapartida el mismo regalo… Ojalá todas las personas que compartamos estos valores seamos capaces de transmitírselos a nuestros hijos… sólo así, dejando de lado la diferenciación por géneros en ciertos aspectos de la vida podremos construir un mañana mejor…
    Nuevamente, gracias!
    Un saludo.

  7. EXCELENTE EN ESTE TIEMPO DE FEMINISMO ABSURDO POR QUE TANTO HOMBRES COMO MUJERES TENEMOS 46 CROMOSOMAS Y POR TANTO PERTENECEMOS A LA MISMA RAZA Y TENEMOS LA MISMA CONDICION HUMANA.

  8. Muchas gracias Mar. Extraordinaria sensibilidad la tuya, combinada con ese special sentido del humor tan fino que y esa agudeza de juicio que nos hace sonreír y emocionarnos a la vez. Un regalo para tus amigos.

  9. Querida Mar,
    Con todo el respeto del mundo, no veo la necesidad de este artículo. ¿Los hombres andan “señalados, juzgados, cuestionados, vulnerables, desnortados”? ¿Dónde exactamente? ¿En la política, donde son mayoría? ¿En el poder judicial? ¿No los estarás confundiendo con las mujeres? Por poner un ejemplo, en la prensa vemos constantemente como cada mujer que denuncia una violación es cuestionada y juzgada, por no hablar del número de mujeres asesinadas por hombres. Claro que existen hombres como los que dices pero ¿cómo puedes asegurar que son mayoría? ¿Has visto los datos sobre las horas que dedican al hogar hombres y mujeres? Y en cuanto a los empresarios que reciben con alegría la noticia del embarazo…puede ser que digan que se alegran, y que no la despidan porque es ilegal, pero mira los datos, por favor, mira lo que pasa después. Hay un abismo muy grande entre denostar a los hombres sólo por serlo y negar rotundamente que existan las desigualdades que existen actualmente. Estamos mejor que en los tiempos de los cazadores de mamuts, por supuesto, pero aún quedan muchas deficiencias y el primer paso para mejorarlas es saber ver la realidad.

    1. Querida Natalia, no sé si la autora del artículo te responderá, pero yo sí quería hacerlo: deberías acostumbrarte a pensar que no todas las mujeres piensan como tú y que, de hecho, muchas han aplaudido y agradecido este artículo, tal y como se ve en los comentarios. No todas deciden -decidimos- luchar de la misma manera. Un saludo.

      1. Hola Noelia, ya sé que a muchas mujeres les ha gustado el artículo (sé leer, muchas gracias  ) y estoy más que acostumbrada a que no todas las mujeres piensen como yo. Podría decirte lo mismo pero no lo hago porque me encanta la libertad de expresión y si alguien no está de acuerdo conmigo no me gusta que se lo calle, como parece que a ti sí. Si estás de acuerdo con el artículo no entiendo muy bien lo de que tú decides luchar de otra manera. ¿Luchar contra qué? No hay ninguna lucha, en todo caso son los hombres los que tienen que luchar con este mundo tan malvado que les ningunea.

  10. Claro que hay que valorarlo,pero como algo natural,como lo que debe ser…o es que en un hombre es diferente??? En las mujeres se da por hecho y a los hombres se les premia!!! Las mujeres trabajamos dentro y fuera de casa,asi que las tareas es normal que se repartan,no pasa nada porque un hombre cambie pañales ,porque ponga la colada o haga la compra ..Antes eran ellos los que traían el dinero y la mujer la que trabajaba en casa,ahora el dinero tambien lo traé la mujer y no se la pone en un ALTAR,encima por trabajar fuera ,no dejamos de hacer el resto de cosas..
    Aùn queda recorrido,por no hablar del respeto,violencia de género y demás…en fin!!! Feliz día!!

  11. Me parece una reflexión genial, simplemente genial.
    La sencillez y claridad de la exposición invita al reconocimiento de lo esencial de lo escrito.
    Sin veladuras, sin falsedad, sin ocultismo, sin mentiras generalizadas.
    Un reconocimiento sincero de lo cotidiano , de lo compartido en familias de bien y de principios .
    Una invitación a la reflexión y al saber cribar día a día la contaminación y falsedad de las noticias que nos llegal por distintos medios .
    Gracias , por saber que hay alguien que aún se acuerda y resalta el trabajo cotidiano y compartido en la FAMILIA.

  12. Increíble… en un dia seńalado para corregir errores y reflexionar sobre lo que hacemos mal.. vais y nos dais las gracias 😳… demostrando una vez mas que sois unas auténticas cracks.. gracias por la lección 😘

  13. Gracias, Mar, por poner palabras a tantos sentimientos que yo tengo. Habrá muchas cosas que mejorar suyas y MÍAS. Pero yo, sin él, no sería yo y no podría. Gracias

  14. Gracias, me ha parecido precioso y emocionante . Yo he dado gracias porque muchos hombres que me rodean son así como los describes entre ellos mi marido , mi padre , mi suegro , mis amigos…creo que sin ellos no sería como soy ahora..

  15. Muchísimas gracias a todos por vuestros comentarios, por vuestro agradecimiento y también por vuestras discrepancias (¡nadie niega que existen desigualdades sangrantes, y que hay mucho que batallar por superarlas!) Gracias también a todos esos otros muchos hombres de bien que se me hayan podido quedar en el tintero. Hay un post en este blog, de mi querida Isis Barajas, que creo que da en el clavo de lo que podría ser la solución: https://www.mujeresteniamosqueser.com/menos-corresponsabilidad-y-mas-entrega/. Ahí está la clave, estoy convencida de ello.

  16. Increíble, refleja la realidad de la gran mayoría de mujeres y hombres de hoy en día. Iguales, ninguno superior, compañeros, aunque quedan metas por alcanzar, pero juntos. precioso

  17. Hola Mar:
    No te conozco de nada, pero como padre divorciado con la custodia completa porque mi ex se ha ido a Suiza y estoy yo con ellos (feliz). Hoy, además de reenviar este post que me ha llegado por mi whatsapp, te voy a poner un pedestal en mi cabeza. Mi enhorabuena por el artículo. Me hace seguir el camino de vuestra igualdad, cada día. Un abrazo (si me lo permites)

  18. Felicidades!!! porque el artículo lo borda, porque no caes en lo típico, en esloganes bonitos pero que no aportan (ojo que trabajo en Marketing)….
    Hoy me había «vacunado» para no oir nada pero contigo me subo al carro de los optimistas y realistas que no ven un enemigo en su pareja.
    Te he dicho felicidades?? pues eso, y otra vez.

  19. Pues antes de leer vuestros comentarios pensaba que iba de coña, y que era un sarcasmo.
    Desde luego que si eso fuera así, como pone el artículo, no habría mucho que reivindicar.
    Evidentemente no es mi caso ni el de nadie que yo conozca. Pero mi más sincera enhorabuena porque parece ser que sí es vuestro caso.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *